Hola chicos:
A partir de aquí,
podemos valorar en qué fallamos y qué podemos hacer para solucionarlo y pasar
después a la práctica.
Entramos en la recta
final de la Cuaresma, tiempo de renovación interior.
Culmen de una
renovación que podemos ver a lo largo de la Biblia:
-
en Noé y su familia (con sus
cuarenta días de lluvia purificadora fuera y ellos y los animales dentro del
Arca) à Dios no busca la destrucción de la Creación sino una nueva.
-
Moisés y los cuarenta años del éxodo
desde la Salida de Egipto hasta la llegada a la Tierra Prometida à Dios no busca
la destrucción de los hebreos sino un pueblo purificado que haga avanzar la
Historia de la Salvación.
-
Jesús y los cuarenta días en el desierto
(después de su bautismo) donde fue tentado por el demonio à a través de
su Encarnación, Dios nos muestra las herramientas para ser un hombre nuevo en
una nueva Humanidad, enfrentándose s nuestro mayor enemigo, el diablo.
La Cuaresma anual es
el momento, pues, de análisis y renovación personal para participar y unirnos, con
un interior más luminoso, a la gran fiesta de la Pascua.
Un primer y gran paso
en esa renovación es reconocer que nos equivocamos, que somos pecadores. Para
ello, hemos ido viendo algunas oraciones que nos ayudan en este paso:
Kyrie
Yo confieso
Pero recordando que
necesitamos alimentarnos para el camino, aquí tenemos una receta de
Cuaresma que nos llega desde México.
Espero que os
atreváis a hacerlas y disfrutéis comiéndolas. ¡Que aproveche!
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